viernes, 23 de mayo de 2008

Y tus labios

A veces de verdad creo que soy un poeta, o incluso algo peor. Busco una canción que me motive, me invite a reflexionar, o persigo también el silencio más absoluto para poder escuchar esas voces que inventa mi subconsciente. Sacar de mi eso que llevo dentro que desconozco, como una inspiración maldita y desatendida.

Tengo decenas de textos comenzados. Relatos, poemas, absurdeces... todos desechados como estoy apunto de hacer con estos parrafos que no llevan a nada. Quizá me he vuelto muy exigente.

Es demasiado dificil escribir cuando se es feliz. No quiero ser monotema! no quiero monopolizar mis versos con mis sentimientos, mi alegría desmesurada, pero no me sale nada más que eso. No sabría escribir ahora una tragedia.

Y todo son tus ojos,
y tus labios.

Necesito ir más allá. Escribir un guión en condiciones sin caer en topicos. Echo de menos actuar desde que mi vida entera dejó de ser puro teatro. Ya no tengo que finjir! No tengo que sonreir cuando no me apetece, no tengo que poner excusas a nadie sobre nada. Echo de menos subir a un escenario y provocar risa, aplausos!

Parece que todos estamos aquí por los aplausos. Yo no los espero como reconocimiento o premio, sino como agradecimiento y alegría proyectada!!

Todavía creo que he venido a dejar rastro. a sentirme querido, odiado o deseado. No me importa que me odien o vean en mi sinceridad un enemigo. Me alegro ahora de las pocas veces que he mentido! y de haber sido sincero el resto. Me felicito por donde me ha llevado todo esto. Mi trabajo diario, mi forma de ser con las personas, mi manera de ver la vida y los ojos con que miro el mundo.

Nada, no puedo arrepentirme de nada, porque todo ese caos de pequeñas cosas, me trajeron a un paraiso del que no quiero salir, no quiero morder la manzana de la vanidad. No quiero sentir vergüenza una vez que todo eso está lejos, bajo tierra.

Sólo quiero mirar tus ojos, sí.

Todo son tus ojos
y tus labios.

Sólamente quiero seguir así, en este acto. No quiero bajar del escenario donde me alumbran los focos y el maquillaje ya se ha derretido. No pienso bajar al patio de butacas ahora que lo veo todo desde un punto un poco más alto.

Seguir avanzando... Ahora el cinco, luego el seis... después de los meses, los años.

Tengo algo que compartir. Empiezo a recoger lo que he sembrado! y creo de verdad que merece la pena. Estoy convencido que merece la pena!

Tus ojos
y tus labios.

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5 comentarios:

Anónimo dijo...

Si hay algo que me gusta de Blogger, es cuando caigo ante un conjunto de palabras que me llenan o con las que me siento identificada. Es curioso, ¿no? Me digo a mí misma "Vaya, pero si esto podría haberlo escrito yo. De otra manera, claro está, ya que cada uno lleva puesto su estilo narrativo. Pero puedo caerme en las palabras, perderme en ellas".

No te arrepientas de nada y sigue caminando. Si no puedes escribir una tragedia griega, ¿qué más da? Puedes contar muchas otras cosas, sencillas, alegres, pero mucho más intensas.

Te leo :)

Hermanita de la Caridad dijo...

Ah! Crees que no tienes que arrepentirte de nada? Y que me dices de los años que ha tenido que pasar Gladys haciendo terapia para subir su autoestima? El dinero que gastó? jaja. En serio, me alegro de que seas feliz!
Besos

Anónimo dijo...

Ya hace tiempo que leo tus entradas y tengo que decirte que escribes verdaderamente bien, sigue así :)

Sam dijo...

wenas!!

Gracias por el coment, lluvia!! a mi tambien me pasa a veces cuando leo otros blogs. y gracias por leerme!! ^^

hermanita!!! jajaja. lo de gladys fueron daños colaterales!! ademas, seguro que ahora es mucho mas madura!! ^^

anonimo/a! gracias por leerme y gracias por comentar!! me alegra que te guste lo que escribo. Te conozco? o llegaste a mi blog por casualidad??

besotes!!

Anónimo dijo...

Bueno llegué aquí a través de una amiga :)